miércoles, 25 de mayo de 2016

La semana pasada Mary-Chan y su blog Series Planet me dieron una idea: elaborar una lista con mis 5 historias preferidas protagonizadas por mujeres. Mientras daba una vuelta por mis estanterías tratando de confeccionar la lista, no he podido evitar observar una interesante relación.

Resulta que los libros protagonizados por hombres tienden a estar escritos por hombres, y viceversa. Al menos los libros modernos, quiero decir. No tengo ni idea del porqué, pero me ha parecido cuando menos curioso. Bueno pues... ¡allá vamos!

#5 Olvidado Rey Gudú


Quizá un poco cogido con pinzas ya que en realidad esta novela escrita por Ana Mª Matute tiene diferentes protagonistas (a lo Juego de Tronos, para que me entendáis), sin embargo desde la primera vez lo leí me pareció que la verdadera protagonista del libro era Ardid, el verdadero personaje imprescindible para la historia. 

En el reino de Olar, una niña llamada Ardid pierde a su familia de una forma cruel a manos del Rey y desde ese momento promete consagrar su vida a vengarse. Con esta sencilla premisa doy pie a una historia de fantasía épica increíblemente imaginativa y quizá sea la obra literaria de este género de mayor calidad que he leído hasta ahora. 






#4 Beatriz y los cuerpos celestes


Esta es la historia de Beatriz, una adolescente llena de inseguridades como lo hemos sido todos en algún momento, intentando encontrarse a sí misma. Una historia triste, trágica y muy emocionante que a mis apenas 18 años de edad consiguió sobrecogerme como ningún libro hasta aquel momento. 

Lucía Etxebarría, la autora, consigue que te involucres en la historia hasta tal punto de odiar o amar a los personajes con la misma fuerza que la protagonista. Quizá la verdadera fuerza de este libro resida en leerlo a la edad adecuada, pero aún así de mis preferidos.







#3 La Materia Oscura


Para presentar esta historia de fantasía diré que transcurre en un mundo similar a la época victoriana inglesa con una estética Steampunk, y una diferencia fundamental respecto a nuestro mundo: las personas tienen el alma fuera de su cuerpo, no dentro, y adoptan el aspecto de un animal. Con la premisa de que obviamente las almas existen, y que por lo tanto Dios también, Lord Asriel se ha propuesto encontrarle y destruirle

Philip Pullman consigue crear una obra de fantasía que se sale de la norma por completo y la protagonista del libro, Lyra, también pertenece al género femenino. Hicieron una peli de la primera parte del primer libro, pero es innombrable. 





#2 Carpe Jugulum


Una familia de vampiros venida a menos ha tramado la manera de resurgir y volver a darle su apellido el esplendor que se merece, y de paso, aterrorizar a todo el mundo. Y en su camino sólo se interpone una mujer: Yaya Ceravieja, una bruja vieja y con un carácter de mil demonios.

La razón por la que incluyo este libro en mi lista y nada menos que en el segundo puesto es bien sencilla: Yaya Ceravieja es el personaje femenino más fuerte y mejor construido que jamás haya leído. Una comedia escrita por Terry Pratchett, de su saga Mundodisco. 







 

#1 Persépolis


Muchos me habéis leído ya hablar sobre este cómic, y no me cansaré de hacerlo y de darle toda la publicidad que merece. Escrito y dibujado por Marjane Satrapi, este cómic narra la primera parte de su vida y me parece una lectura casi obligada.

Nos cuenta como Irán pasó de ser una sociedad abierta y liberal a ser absorbida por un régimen fundamentalista islámico. De cómo se puede retroceder hacia la época medieval en muy poco tiempo, y de cómo vivió ella aquellos años. De cómo la obligaron a creer en un Dios que para ella no importaba y como la impusieron el Velo.







¿Habéis leído alguno de los títulos de mi lista? ¿Cuáles son tus historias preferidas protagonizadas por mujeres? Valen pelis también, ojo, y su hubiera tenido que poner un #6 habría sido Alien.

Más: anteriormente en La Fabulosa Gallina De Goma, la verdadsobre 'El libro de la selva'

martes, 17 de mayo de 2016

¿Alguna vez habéis visto una cinta de lomo ENTERA? Ojo, no unos filetitos de lomo ricos recién preparados por la abuela, no. Me refiero al trozo entero. Ese medio metro de carne que pesa más de 5 kilos.

Obama no ha querído perder la oportunidad de participar también en este jueguecito

En serio, para visualizarlo todos juntos, hagamos un sencillo ejercicio consistente en separar las manos y tratar de calcular a ojo de buen cubero cuánto mide medio metro. ¿Ya lo  tenéis? 

Bien. Os pido que NO borréis esa distancia imaginaria de vuestra cabeza por un minuto, sólo un minuto. Es porque quiero compartir con vosotros una expresión magnífica.

Casi, Ángela, pero es un poquito menos. Los alemanes sois unos exagerados, hija.

Veréis, me han dicho que no muchas veces. En serio, no hace falta que sea un 'no' importante, simplemente una negación simple formulada por medio de dos pequeñas letras de nuestro magnífico alfabeto. ¿Te gustan los huevos cocidos? No. Es fácil, a todos os habrán dicho que no alguna vez, ¿verdad?

Hablemos ahora de niveles de rotundidad.

Porque no es lo mismo un 'No, pero' que un seco no. También, cuando queremos expresar una negativa tajante podemos acompañar el 'no' con una serie de palabras que unidas a la negación como un apellido se une al nombre le confieren cierta solemnidad. 'No, imposible'. 'No, y punto'.

Pero todas estas conocidas lecciones sobre la negativa se quedan cortas, queridos amigos, al lado del inmenso poder de negación que escuché en una sencilla combinación de palabras el otro día. Tan rotundo y contundente que te tira de espaldas. Aún hoy cuando sueño pienso en esa expresión: quien domine tal capacidad semántico-lingüística sin duda llegará a ser alguien importante en este mundo.

Y es que, cuando queráis decirle que no a alguien, pero que no de verdad, mucho más tajante que un 'No, ni hablar', yo os recomiendo que apliquéis la fórmula que utilizaron conmigo el otro día:

-No, y una polla como una cinta de lomo.

Os lo prometo: descubriréis que no hay respuesta posible a semejante negativa. Es un 'no' inmenso y categórico, ¿verdad? Ahora os estáis acordando del jueguecito de antes con las manos, ¿eh? Pues eso. Me dijo que no, y fue que no

Que no, Mariano, que así no. Con las 2 manos, presta un poquito de atención.

 

Más: anteriormente en La Fabulosa Gallina De Goma, De Dioses y pollos va la cosa

miércoles, 11 de mayo de 2016

La sirenita del famoso cuento, en Copenhague

Había caído el sol durante todo el día, y se dejaba notar a pesar de estar ya entrada la tarde. Maite, la recepcionista de la academia, se reía mientras intentaba explicarla que pensaba que las clases empezaban 15 minutos más tarde. Ella me agarró del brazo sin ninguna diligencia y me metió en un aula por completo desconocida para mí. Busqué, con la mirada, una silla en la que sentarme en medio del desconcierto de la clase.

Fue entonces cuando la vi. A mí no me importaba nada de lo que hubiera en clase, solo ella. Aquella camiseta roja con la imagen de una moto que dejaba adivinar sus formas. Aquellas manos morenas, una de ellas salpicada por una quemadura, y sus preciosas muñecas adornadas por pulseras de pinchos. Aquel reflejo oscuro de cabello moreno y largo, peinado en tirabuzones. Y los ojos.

A pesar del tiempo transcurrido desde que los vi por primera vez, y de los muchos y bellos momentos o los sinsabores que aquellos iris marrones iban a introducir en mi vida durante los años siguientes, todavía hoy sigo siendo incapaz de expresar el efecto de esa mirada pícara y luminosa, tan engañosamente limpia, idéntica a los ojos de una pantera que observa desde lo alto de un árbol.

Para mí, Ana era solo una visión celestial, maravillosa, tan lejos de mi pobre condición mortal como podían estarlo la luna o la más brillante estrella de las que la acompañan.

Se van a cumplir 11 años desde que viví ese momento y casi 10 desde que escribí este puñado de líneas, y no quería dejar pasar la ocasión de conmemorar esos momentos de la adolescencia tan intensos y agridulces que ya nunca volverán. Este es mi pequeño homenaje a esos años, pero seguro que tú, mi querido lector, también habéis tenido sentimientos así. ¿Me los cuentas?

Más: anteriormente en La Fabulosa Gallina De Goma, Las mujeres de mi vida